sábado, 26 de diciembre de 2009

UN SIGNIFICATIVO RECONOCIMIENTO A MANUEL TAVARES JULIA








El 25 de diciembre el Grupo pro Rescate de la Historia y la Cultura de San José de las Matas rindió un significativo homenaje a don Manuel Tavares Julia al colocar un busto suyo en el bulevar de la avenida que él mismo construyó hace 82 años.
Don Manuel era santiagués de nacimiento y matense de corazón. Contribuyó al desarrollo de este pueblo en todos los órdenes, prevaleciendo su humildad y sencillez con los habitantes del pueblo y a los campesinos.
El Grupo pro Rescate está coordinado por Juan Carlos Jáquez, Tony Santiago y Piero Espinal Estévez. Los colaboradores son José Abelardo Estévez (Palalo), Wilson Marte, Gilberto Jáquez y Félix Germán.
Insertamos aquí la semblanza de don Manuel, escrita y leída por su biznieta María Emilia Thomen:

Manuel Arturo Tavares Julia nació en Santiago el día 3 de abril de 1887, hace 122 años, y murió aquí, en su tierra San José de las Matas en el año 1953.
Manuel Arturo eligió vivir en este pueblo por motivos de salud. A muy temprana edad enfermó de tuberculosis. Para esa época no existían los antibióticos. La tuberculosis era una enfermedad incurable. El enfermo mejoraba con un clima seco y frío y con mucho reposo. Él decía que si nos fijamos bien desde que se pasa el río Yaque y se llega a Las Matas no se atraviesa un solo río, lo cual garantizaba el clima.
Manuel Arturo se casó con Rosa Batlle y tuvo dos hijas: Rosita y Julia. Apenas Rosita, con 5 meses de nacida, en el año 1905, vinieron a pasar las navidades a Las Matas y residieron durante muchos años en una casa del pueblo que quedaba frente al correo y tenía el cerrito de traspatio.
A pesar de su enfermedad, manejaba la compañía Manuel de Jesús Tavares & Sucs., dueños de la tienda El Gallo y La Paloma. Durante sus estancias en Las Matas manejaba el negocio por correspondencia.
En el año 1926, ya curado de su enfermedad, construyó su casa en este pueblo. En Santiago vivía en una casa alquilada a un hermano. Ambos hechos revelan que ya tenía sus raíces Las Matas, era ya su hogar.
Manuel Arturo Tavares amaba La Sierra, las mecedoras serranas, las historias de ciguapa, sus paisajes. Organizó un concurso de alpinismo para medir la altura del pico Duarte y de este concurso publicó un libro llamado Alpinismo Dominicano, el cual recogió los relatos, anécdotas y resultados de los grupos que participaron.
Contribuyó al desarrollo del pueblo de muchas formas: brindó majestuosidad y belleza a la entrada del pueblo sembrando los samanes que ahora nos cobijan. En base a un modelo alemán de gran belleza construyó el Cristo, a donde todo el pueblo peregrina en Semana Santa. Donó el terreno del club y el parque.
Manuel Arturo Tavares fue un hombre muy inteligente. Sin haber viajado conocía el mundo. Era despierto y curioso. Amaba las cosas útiles y bien hechas. No conocía el ocio. Cuenta Yiyí Jáquez que en los días de lluvia, luego de haber enderezado los clavos viejos para volverlos a usar, de haber cortado la cuaba en palitos del mismo tamaño y de haberlos empaquetado para que las visitas no se fueran con las manos vacías, los peones preguntaban: ¿y ahora qué hacemos? Él respondía riendo: ahora vamos a majar agua.
Manuel Arturo amó esta tierra de San José de las Matas. En ella construyó su casa, crió a su familia y murió. Participó con visión en la construcción del pueblo. Rosita, su hija, siguió amando este lugar, al igual que sus hijos y nietos.
Hoy develamos con orgullo este busto frente a nuestra casa y reconocemos sus grandes virtudes. Nuestro bisabuelo era un hombre honesto, humilde, emprendedor y con un alto sentido de la familia. Hagamos de sus virtudes también las nuestras.


El busto de don Manuel es obra del artista matense Máximo Ceballo.

martes, 22 de diciembre de 2009

DE LOS CORRALES A LAS PIEDRAS











El domingo 20 de diciembre salimos del parque municipal caminando hacia Yerbabuena, seguimos a Los Corrales, Los Jíbaros, Las Piedras, Guazarita, Los Montones Abajo, Arroyo Hondo y regresamos a Las Matas.
Un trayecto muy bonito, muchas áreas reforestadas, aunque encontramos en el camino unas cuantas pilas de troncos de pino recién cortados, que lo sacan de contrabando.
En Los Jíbaros compartimos con una señora de 104 años, con mente lúcida y buen estado físico.
En el camino nos encontramos con un grupo de motociclistas que hicieron un recorrido por la orilla del río y caminos intermontañas.
A este grupo que me acompañó, la mayoría alumnos míos del liceo técnico Canadá, lo estamos motivando al cuidado y respeto de los recursos naturales y a la vez facilitándole el conocimiento de los mejores lugares del municipio de San José de las Matas.

jueves, 17 de diciembre de 2009

NUESTRO CEMENTERIO: UN DESASTRE







El cementerio de San José de las Matas está muerto. En otros lugares hay camposantos, cementerios ornamentales, donde la gente acude como a un lugar de turismo cultural, a caminar por sus calles, observar sus tumbas y estatuas sacras, investigar sobre personajes famosos o sobre familiares desconocidos, etc.
Nada de esto se puede hacer en el cementerio de Las Matas. Lo que vemos allí es un desastre. El pasillo principal lleno de "totumas" que hacen tropezar a cada paso, mucha yerba, desperdicios de construcción, basura y uno que otro hueso, residuos de ataúdes o de ropa de los difuntos exhumados.
Nunca ha habido planificación en la construcción de tumbas, hay una arrabalización extrema. En muchas partes hay que caminar de lado para poder cruzar entre una tumba y otra.
Lo asombroso es la altura que tienen los "multifamiliares" construidos en el anexo del cementerio. Se necesita una grúa que deposite el ataúd en el nicho. Es raro que todavía no se haya caído una "caja" y lesionado a los hombres que hacen esfuerzos sobrehumanos para depositarla en el astronómico nicho.
El colmo es el estado en que se encuentra el osario. En ese lugar deben depositarse los huesos de los difuntos que hayan sido sacados de los nichos públicos o de tumbas no identificadas. El depósito de este cementerio está completamente lleno, hasta el tope, y no sólo de huesos, sino de ropajes y madera de las cajas, desperdicios éstos que no deben depositarse allí. Pedimos la limpieza inmediata del osario y sacar toda la basura de allí.
Urge el acondicionamiento de nuestro cementerio y la construcción de uno nuevo, bien planificado y que no tenga esas tumbas tan grandes y mal hechas y además pintadas con colores chillones, como hemos visto varias. Lo ideal sería que los cadáveres fueran enterrados y solamente se colocara una losa en el lugar de su tumba, así caben más y tendremos un camposanto de verdad, que inspire paz, la paz que debe reinar en un lugar como es el cementerio.

sábado, 12 de diciembre de 2009

UN HOMENAJE A ALEXIS JÁQUEZ











Alexis Jáquez (1923-2005) fue un munícipe matense que amó profundamente su pueblo. Ocupó cargos relevantes en la Cooperativa San José, Ayuntamiento Municipal, Asociación pro Desarrollo de la Comunidad, Club Centro Serrano y otras instituciones importantes de la comunidad.
Por su dedicación y esmero en pro del desarrollo económico y cultural de San José de las Matas, el Grupo pro Rescate de la Historia y la Cultura de San José de las Matas lo reconoce colocando un busto suyo en el bulevar de la Avenida. Este grupo está compuesto por Juan Carlos Jáquez, Tony Santiago y Piero Espinal Estévez.
La obra escultórica fue elaborada por el artista matense Máximo Ceballo y patrocinada por la Cooperativa San José Inc.

EN EL PICO YAYA











El domingo 6 de diciembre subimos al pico Yaya, en Corozo, acompañado de mis alumnos del liceo técnico Canadá y de otros invitados.
El objetivo de estas excursiones es conocer nuestro municipio y a la vez crear conciencia sobre la protección del medio ambiente y nuestros recursos naturales.